SOYD: La Esencia en mi
SOYD es mucho más que un personaje que dibujo en todos lados desde que era una niña.
Lo dibujé por primera vez cuando tenía como 5 ó 6 años. En ese entonces no tenía la misma forma que tiene ahora pero su esencia ya se sentía a través del papel. La primera vez que lo dibujé fue cuando empecé mi búsqueda espiritual que fue impulsada por el miedo a la muerte y que después se convirtió en la búsqueda profunda de Dios. Recuerdo que un día un amigo de mi mamá me pidió que dibujara a Dios como me lo imaginaba y dibujé algo similar al símbolo del yin yang, un círculo dividido en dos por una línea vertical, la mitad del círculo lo pinté de negro y la otra mitad la dejé blanca como el papel donde estaba dibujando. Le expliqué al amigo de mi mamá, así de niña que era, que para mi Dios era todo y por eso lo dibujaba así. Entonces él me enseñó una imagen del verdadero yin yang y mi corazón dio un salto enorme, no solo por darme cuenta que alguien más sentía lo mismo que yo sino que pude ver que dentro de la parte blanca había un pequeño círculo negro, como un ojo (del otro lado era lo mismo pero con los colores invertidos), y en ese momento, como si fuera magia, dibujé a SOYD en su primera forma visible, como una gotita de agua con un ojo grande.
Para mi SOYD es y siempre ha sido la manera en que dibujo a Dios, a la Esencia Divina.
Desde niña, hasta hoy, siempre he dibujado para encontrar respuestas, comprender mensajes y ponerle orden a todo lo que pasa en mi mundo interior. Siempre que me siento confundida, estresada o en crisis, lo que más necesito es regresar a mi muñequito en mi cuaderno, porque dibujarlo y hablar con él sobre el papel me regresa a la paz interior que sé que siempre está en mi pero que muchas veces olvido.
Siempre he reconocido que la Esencia me habla y me acompaña a través de SOYD y si se preguntan que ¿cómo supe que era la Esencia? la verdad es que mi corazón siempre lo supo porque cuando eres niña tu mente no se ha apoderado de ti y además porque mi mente de niña nunca había pensado o hablado como ese muñequito me hablaba. Siempre que tenía preguntas encontraba las respuestas en SOYD, algo que sigue sucediendo hasta el día de hoy. Su voz está llena de sabiduría - no de datos - está llena de amor, de certezas, de paz. Sus respuestas no vienen de mi ego, de mis ideas preconcebidas o conceptos intelectuales sino que surgen del Silencio de mi Ser, de ese Silencio que es la Esencia en su estado puro.
SOYD es quien siempre tiene la frase perfecta, el que me recuerda una y otra vez que dentro de mi están TODAS las respuestas y que mi único trabajo es quitar a mi mente de en medio para que pueda escucharlas, escribirlas, ilustrarlas y compartirlas.
El significado de su nombre
SOYD no solo es la palabra DIOS alrevés pero con “Y” en lugar de “I”, sino que en esas 4 letras está toda mi filosofía de vida, mis respuestas y mi mensaje.
La “S” es de Silencio, de Ser….de SIlencioSer que es la respuesta final de todo mi Camino espiritual.
La O y la Y van juntas y es la palabra YO alrevés, es decir, nuestra naturaleza humana, nuestro ego o nuestra individualidad…pero también la letra O es un círculo que representa la Nada que es el Todo al mismo tiempo, el círculo que representa la Unidad Total, el Vacío, el Silencio-Esencia del que todo nace; y la Y es la dualidad que regresa a la Unidad porque si se fijan, esta letra está compuesta por 2 partes, una V chiquita (UVE) es decir dos líneas diagonales, que cuando se juntan en la parte de abajo se vuelven una misma línea vertical, o sea la dualidad regresando a la Unidad.
Y finalmente la letra D de Dios, de Diosa, de Divinidad. No solo la Divinidad que nos trasciende, sino la Divinidad que nos habita.
En estas 4 letras (S O Y D) está TODO mi camino, mi mensaje, mis preguntas y respuestas porque en ellas hablo de la gran Unidad, de Dios, de nuestras 2 naturalezas (la humana y la Divina), del ego, de la Esencia y de SilencioSer. Y además SOY-D es el reconocimiento de SOY Dios… o como diría Rumi, ya somos lo que buscamos. Dios está dentro de nosotros porque Es nosotros. Como he dicho millones de veces y diré millones de veces más, todo lo que existe es una expresión de la misma Esencia, una expresión de Dios y cuando reconocemos esta verdad y la vivimos en nuestra vida cotidiana, entonces podemos decir que estamos despiertos y que hemos regresado a Casa.
SOYD, mi muñequito adorado, mi compañero de vida no es solo un personaje, es la Esencia Divina, el Silencio hecho dibujo. Por eso no tiene boca, porque SOYD no habla a través de las palabras sino a través del Silencio.
Deseo que a partir de ahora, cada vez que lo veas en alguna de mis ilustraciones, también puedas reconocer a la Esencia que vive a través de ti y que sientas todo ese amor que la Divinidad te da a través de él.
SOYD me ha enseñado que el arte no solo es importante por todos los mensajes y emociones que regala a los demás, sino porque es una de las mayores formas de meditación y sanación. Así que cuando veas a SOYD en alguna de mis creaciones, recuerda que no solo es un muñequito sino la manera más pura y amorosa en que la Esencia se expresa a través de mi y que desde el lienzo te habla y te abraza también a ti.
